Hotstpot WiFi: ¿qué es y de qué tipos podemos encontrarlos?

Hoy en día en cualquier ciudad no es raro ver un cartel en la puerta de un restaurante o de un bar en el que se anuncie WiFi gratis para los clientes. No son los únicos sitios, ya que en la mayoría de bibliotecas públicas y lugares de interés (como centros comerciales u hoteles) no es raro encontrarse también con anuncios de conexión inalámbrica gratuita para clientes. Estos son los llamados hotspot, a grandes rasgos.

En este artículo vamos a definir qué son exactamente, sus ventajas, sus inconvenientes, qué tipos de hotspot podemos encontrar y, quizá la pregunta más importante que debamos responder, si son seguros. Sigue leyendo para saber más.

¿Qué es y cómo funciona un hotspot WiFi?

Como podrás imaginar por lo que acabamos de comentar, los hotspot o puntos de acceso WiFi son lugares físicos que te permiten conectarte a una red inalámbrica usando tu teléfono móvil, un ordenador portátil o cualquier otro dispositivo que haga uso de este tipo de redes. Como te decíamos antes, ciudades, empresas y organismos han empezado a ofrecer estos puntos de acceso para uso público.

Un hotspot, desde el punto de vista del usuario, funciona como una red inalámbrica doméstica o empresarial. Ofrecen conexión a Internet a través de un equipo inalámbrico especial, con el que se crea una red WiFi a la que conectarte con cualquier dispositivo preparado para acceder a ellas.

El alcance y la potencia de uno de estos hotspots pueden variar en función del lugar en el que se encuentren, aunque no debes perder de vista lo fundamental: que un hotspot funciona, en esencia, como una red doméstica y que puedes conectarte a su red y usarla como si de la de tu casa se tratase.

Tipos de hotspot WiFi

En cuanto a su funcionamiento y forma de utilizarlo es cierto que todos los hotspots son muy parecidos, hay distintos tipos. Cada uno tiene sus particularidades, que pasamos a detallar a continuación.

Hotspots WiFi públicos

Un hotspot WiFi público es exactamente lo que se deduce de su nombre. Por regla general son de uso gratuito, aunque no siempre es el caso. Es el tipo de conexión a Internet que se ofrece a los clientes de bares, restaurantes y cafeterías (también en bibliotecas públicas).

En las ciudades es habitual que los ayuntamientos o los proveedores de servicios de Internet (ISP por sus siglas en inglés) ofrezcan conexión gratuita en algunas áreas. Por norma general, como decíamos antes, usar estas redes es gratis, pero es posible que en lugares como hoteles y aeropuertos tengas que pagar para usarlas.

Hotspots WiFi Móviles

Algo que es posible hacer con cualquier teléfono móvil (agnóstico al sistema operativo, tanto con Android como con cualquier otro es posible) es convertirlo en un hotspot portátil que puedes llevar en tu bolsillo a cualquier parte. Cuando activas esta función, puedes conectar cualquier dispositivo que soporte las redes inalámbricas a tu teléfono y ofrecerles servicio de acceso a Internet.

También puedes comprar dispositivos físicos que actúan como hotspots WiFi desarrollados específicamente, que convierten cualquier conexión de datos móviles en una red inalámbrica estable. Es la opción ideal para las personas que viajan mucho y necesitan una conexión a Internet en cualquier parte.

Hotspots WiFi prepagados

Son similares a los hotspots móviles, pero limitan la cantidad de datos que puedes consumir con esa conexión. Para poder usarlos hay que pagar por adelantado una determinada cantidad de datos y, cuando la consumes, el pago por más datos se renueva automáticamente.

¿Son seguros los hotspots WiFi?

Siempre que se habla de puntos de acceso WiFi, la seguridad es un tema que preocupa mucho a los usuarios. La mayoría de los hotspots que vamos a encontrar son públicos y de acceso libre, lo que puede ser peligroso para nuestros datos. Esto no quiere decir que no pueda darse el caso, dado que en su mayoría son redes relativamente seguras, pero eso no quita para que no podamos tomar una serie de precauciones.

Tengamos en cuenta que, precisamente por ser puntos de acceso públicos y de acceso fácil, usuarios malintencionados podrían espiar los datos de quienes se conecten a ellos. Por eso mismo, si vas a usar un punto de acceso WiFi, te recomendamos hacer lo siguiente:

  • Utiliza un servicio VPN. De esta manera, enmascararás la dirección IP de tu dispositivo.
  • Si estás usando un ordenador portátil con Windows, marca la conexión como pública la primera vez que establezcas un vínculo con el hotspot. El sistema operativo de Microsoft ofrece unas cuantas salvaguardias de seguridad en la configuración de red cuando la red es pública. No obstante, volvemos a incidir en que es mejor prevenir con el uso de una VPN.
  • Accede a servicios web que cifren tus datos. Todos ellos empiezan con las letras “HTTPS” en el encabezado de la dirección de la página web. Esto significa que cuando entremos en esas direcciones, nuestros datos quedarán codificados. Nadie desde fuera debería ser capaz de ver qué estamos haciendo bajo el protocolo HTTPS.

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